
La próxima semana en la ciudad de Barcelona se celebra el Festival 42, un lugar de encuentro para lectores de géneros fantásticos organizado por el ayuntamiento en el que se invita a asistir a quien quiera. Es gratuito y de entrada libre, solo tienes que mirar en el programa qué te interesa, colocarte a la cola para entrar en la sala y disfrutar del evento.
Aunque su columna vertebral son las charlas, a su alrededor cada vez puedes encontrar más actividades, desde un concurso de Cosplay a una obra de teatro. Este es solo el quinto año, así que nos interesa apoyar el evento, porque con cada año siendo un éxito de asistencia se suman actividades y la confianza del consistorio en el festival aumenta. Hay que proteger a toda costa este tipo de eventos.
Sede del Festival 42
Su sede principal es la fábrica Fabra i Coats, un complejo industrial textil de principios del siglo XX (aunque su inicio real es de mediados del XIX) que fue comprado por el ayuntamiento en los dosmiles y que se utiliza como centro de arte contemporáneo. Son habituales los espacios industriales en Barcelona que han sido expropiados y/o reconvertidos para equipamientos y espacios culturales. Es un recurso de la ciudad para mantener el patrimonio con una utilidad que haga que el catálogo histórico siga vivo.
En este caso, la rehabilitación la llevaron a cabo Francesc Bacardit y Manuel Ruisánchez con una política muy poco intervencionista. El espíritu de la rehabilitación fue el de afectar lo mínimo posible la arquitectura inicial, colocando estructuras cuasi desmontables que permitan ver permanentemente dónde nos encontramos. A la vez, la obra busca que el espacio puede adaptarse a las demandas cambiantes del lugar. Se puede reconfigurar prácticamente todo para que sea el edificio el que esté al servicio del uso y no al revés. Reconozco, que habiendo ido los cinco años, le veo ciertos problemas prácticos a este uso específico y creo que el proyecto peca de una falta de conciencia de la ausencia de recursos reales para hacer cambios constantes, pero entiendo el espíritu y me gusta bastante más que cuando un arquitecto busca en una obra pública dejar su firma en cada piedra y tratarla como si se tratara de una obra de arte y no de una herramienta práctica.
Fabra i Coats se encuentra en Sant Andreu del Palomar, una de esas zonas que no conocerás si eres de fuera y solo has visitado Barcelona por turismo, pero uno de esos barrios donde viven los vecinos de verdad, los que no nos podemos permitir pisos de 150 metros y dos alas de l’Eixample. Es un barrio de gente normal, con comercio normal donde podrás comprar botellas de agua para las charlas o comer un plato combinado en los descansos. Chafardead un poco y disfrutad de la ciudad.
Por cierto, está perfectamente comunicado por transporte público.
El Festival 42, actividades principales
En el programa del ayuntamiento podréis consultar todas las charlas y mañana colgaré un post con mis esenciales, pero para que entendamos la estructura del festival: Una sede principal, en la que hay dos exposiciones, libros a la venta y charlas. Sedes secundarias que aumentan conforme pasan los años donde hay presentaciones, más charlas y eventos varios.
Las exposiciones de este año pintan más que bien. La principal esta comisionada por Laia Baldevey, ilustradora y especialista en folky catalán que tiene publicado Mitologia del paisos catalans, tema central de la exposición que recorrerá quince personajes esenciales de nuestra mitología. Laia no es la única que los últimos años está batallando para que el folclore de la península ibérica se dé a conocer. Hay varios perfiles de gente joven que le está dedicando un porrón de horas a que nuestra historia no se pierda, y vale mucho la pena escucharles.
Pero eso no es todo, en la biblioteca Ignasi Iglesias (pegadita a Fabra i Coats) podemos siempre visitar una segunda exposición. Este año habla sobre la ciencia ficción catalana del último siglo, repasando los temas troncales y referentes que han marcado estas décadas en una definición amplia (veo en la ficha que, por ejemplo, contemplan a Sisa, cantautor esencial), donde se repasan clásicos como Pere Calders, pero también nombres actuales como Roser Cabré-Verdiell.
Como todo festival literario, no pueden faltar la venta de libros. El 42 no tiene una feria abierta al uso, pero sí un puesto de libros coordinado por una librería de la ciudad que rota cada año. Este año La Independent será la encargada de tener ejemplares de todo lo que podamos desear. La Independent es un local del Raval especializado en, como su nombre indica, editoriales independientes, dan voces a sellos minoritarios en espacios confortables que lleven a un consumo más pausado. Tienen un local en Barcelona y otro en Madrid. Aunque en el puesto del festival no podréis tener todo su catálogo, sí tendrán ejemplares de los autores y editoriales que tienen presencia esa semana. Si os tienta algo de lo que os hable alguien en un pasillo, lanzaos. Además, tras cada charla, los autores suelen estar en un espacio firmando ejemplares. Es el momento de cazar tesoros en forma de dedicatoria. Un plus: Barcelona es una joya para la industria editorial y está bien comunicada, es decir, al festival van tus traductores favoritos y muchos ilustradores. Pedidles también una firma, con el tiempo os hará mucha emoción ver el garabato de la persona que hizo posible que os llegara un idioma lejano.
Este año, además, el Gremi de Llibreters de Vell de Catalunya tendrá un puesto en el vestíbulo con ejemplares de segunda mano. Juraría que es el primer año que están, así que no sé qué nos podremos esperar, si simplemente ejemplares de segunda mano o si podremos bucear entre alguna joyita. Reconozco que como sea lo segundo voy a flipar y a sacar la tarjeta. Habrá que sobrevolar la zona los primeros días para que no se me lleven ningún tesoro.
Si os gusta el cosplay quedaos a ver. El 42 organiza su propio concurso con un jurado muy molón: Vampisaurus (Sofía Guerrero), Mara Von Entropy (Mara Antón) y Family for cosplay (Anam Stubbington), tres habituales de las redes con un porrón de callo en el mundillo valorarán vuestras vestimentas. El tema es muy amplio: personajes de libros o adaptaciones a cine, series y videojuegos dentro de los géneros de terror, fantasía o ciencia ficción y entra casi todo lo que tenga que ver con los géneros fantásticos. Echadle un ojo a las bases e inscribíos si os animáis.
Dejo para el final algo de lo que no hablaré hoy demasiado: los autores. La columna vertebral del Festival 42 son charlas con autores. No se suelen hacer presentaciones de libros al uso, pero sí coloquios sobre temas transversales o charlas específicas de un autor sobre un tema. El programa es enorme y os recomiendo atacarlo desde dos frentes. Primero, mirad entre el listado de charlas, no os aburméis pero picotead a ver si veis temas que os llamen la atención, dejaos tentar no tanto por los nombres, como por los temas, como quien va a una biblioteca y ojea sin ton ni son. Segundo, repasad la lista de participantes, en ella están los nombres de los propios autores pero también de los conductores de las charlas. Encontraréis muchos nombres que os suenan de las estanterías o de las redes. Es la oportunidad de escuchar a tu divulgador favorito entrevistando a un autor que no conoces, y también la de ver con quién han emparejado a los nombres que ya te gustan de antemano. Una recomendación básica: lleva libreta. Te saldrán los nombres y títulos por las orejas, anota todo, porque querrás recuperarlo. Es habitual que los propios ponentes mencionen a colegas que están leyendo y no te suenan de nada. Aprovéchalo.
Lo dicho, en un par de días comparto mi lista de esenciales de este año.
Un paraguas necesario: el +42
Los festivales literarios tienen algo mágico y es que, conforme pasan los años, se extienden como una mancha de aceite por su entorno. El +42 es ese paraguas que da cabida a un montón de ideas que se apuntan a colaborar esa semana. Es una semana donde proliferan los clubs de lectura, las presentaciones en Gigamesh, las grabaciones de podcasts, varias bibliotecas se suman con programación propia. Fijaos en la sección de la web y, en general, mirad por la ciudad. De año en año salen más cosas y el que las apoyemos es lo que hará que sigan creciendo. Por mi parte, esa semana corretearé sin freno para no perderme nada.
Quiero señalar el estreno de la obra de teatro de Loredana Volpe e Inés Galiano: La noche de los mundos, una obra inspirada en Hamlet cuyo libreto podéis encontrar en librerías. Primero porque el teatro de géneros fantásticos está al alza y el que haya teatro en festivales literarios es una incorporación reciente que me encanta. Pero además porque ambas autoras son nombres que no hacen más que sonar por todos lados. Loredana es, de hecho, la autora de la obra de teatro del Celsius de este año; pero es que Inés lo fue el anterior. Que estén trabajando juntas es algo que mola mucho.
Lo mejor: tú
Que no te cuenten milongas, lo más más chulo de un festival literario somos tú y yo. Es un lugar para conocer a otros especímenes como tú que se alteran al hablar de un título, que callamos cuando nuestro autor favorito habla o que nos cuesta ver a gente para la que los libros sean algo tan importante. Es la oportunidad de ponerle cara a un bloguero, de charlar en la cola sobre un artículo que leíste y de pasar muchas horas en los bares. En mi primer Celsius no llegué a pisar ni una charla. Quiero un pin que certifique mi éxito.
Aprovecha esos días para sentirte bien y para unirte a un grupo que ande comentando la jugada. Somos gente afable que conversamos con desconocidos y a los que un secuestrador podría con nosotros si dentro de la furgoneta hay un sofá mullidito y estanterías repletas de papel. Y además siempre estamos los mismos por estos saraos recorriendo el territorio; las mismas caras en la Hispacón, en Avilés y en cualquier lugar donde haya géneros fantásticos. Si nos conoces en una, nos tendrás en todas.

