Año: 2014
Editorial: Autopublicado
Género: Novela
Valoración: Mejor no
Seguimos con nuestra labor literaria aunque los 40 grados a la sombra del lugar en el que me encuentro inviten a la siesta, la piscina y poco más. Hoy traigo La morada de Dios, un libro de suspense autopublicado basado en una abadía.
Esta es la primera vez desde que escribo en Libros Prohibidos que no me veo capaz de hacer una sinopsis. Esto viene derivado de la falta de unidad temática que La morada de Dios tiene, por lo menos en sus primeros compases. Es cierto que la historia va del viaje iniciático que debe realizar un hombre normal criado en una abadía, pero el argumento empieza con el suicidio de ese mismo hombre y luego va dando bandazos hasta que por fin, casi a mitad del libro, y es posible que demasiado tarde, el lector empieza a encontrar sentido a lo que tiene en sus manos. Sin embargo, más adelante vuelve el caos y la desorientación al hilo narrativo, que deja la sensación de que los elementos están mezclados sin orden.
Esto convierte La morada de Dios es una novela difícil de seguir y muy difícil de valorar. El disfrute va a depender en gran medida (más de lo que sería recomendable) de los gustos personales del lector. La novela está orientada a personas a las que les interese el cristianismo y lo relacionado con él (arte, historia, costumbres, mitología) y poco más. El punto de vista, tanto del narrador como de los personajes, es el de la Iglesia Católica, o el de gente muy cercana a la misma. De este modo es fácil quedarse fuera de la acción.
Dicho lo cual, pasamos al final de la historia, que en su afán de sorprender, solo consigue rizar el rizo. No resultan creíbles ni convincentes los motivos que mueven a los monjes a hacer todo lo que hacen. El último capítulo dando explicaciones tampoco soluciona nada, solo acentúa esa sensación de inverosimilitud.
Aunque tiende a adornarse un poco, el estilo está perfectamente adecuado con la historia. Otro punto a favor (hasta que alguien diga lo contrario) es la documentación histórico-artística. Ofrece numerosos datos, curiosidades y elementos muy variados que suman interés al global de la trama.
En resumen, solo decir de La morada de Dios que es una novela de suspense que no podemos recomendar.