Título original: Hora zulú
Idioma original: Gallego
Año: 2012
Editorial: Mar maior (2015)
Traducción: Santiago Lopo
Género: Novela
Valoración: Muy recomendable
¿Existe el amor a primera vista? Cuántas veces habremos visto una escena en que un hombre queda embobado cuando de súbito entra en la sala una mujer bellísima. De repente, el mundo se ralentiza, todo se silencia, y un ventilador de pura casualidad hace que el pelo de ella se eleve de forma sensual y en absoluto ridícula. Por más que Hollywood nos haya insistido machaconamente en esta idea, jamás me la creí. En la literatura, en cambio, me ha pasado más de una vez que sólo he necesitado leer dos o tres páginas de un libro para saber que va a ir directo a mi estante de lecturas favoritas. Queridos lectores, hoy les tengo que confesar que me ha vuelto a pasar. Me he enamorado… de un libro. Hora zulú, se llama (gracias, Mar Maior, por el ejemplar).
Si hay un rasgo que detesto en la literatura (como en cualquier otra manifestación artística) es que me lleven de la manita, me lo den todo bien masticado, y me traten como si me faltara alguna neurona. Por eso, jamás soporté a Coelho y, por eso, se me resiste la moda del pulp. Me gustan las novelas sutiles, las que exigen lectura activa, las que callan mucho más de lo que dicen y muestran mucho más de lo que cuentan. Hora zulú pertenece a este tipo de literatura, con la ventaja de estar además ejecutada con maestría.
Esta obra es lo que en su editorial llaman una “novela puzle”. Hay un misterio por resolver: ha aparecido un hombre amnésico y desorientado a los pies de un acantilado. Sabemos que fue ingresado en un hospital psiquiátrico con un diagnóstico incierto, y que murió unos años después dejando muchas preguntas sin resolver. El lector se pone el gorro y la pipa de Sherlock Holmes, y se enfrenta a unas pistas que le vienen en forma de textos de distintos géneros (muy al estilo El imperio de Yegorov): poemas, informes médicos, cartas, e incluso cinco pequeñas novelas dentro de la propia novela. Los distintos textos no aparecen en orden cronológico y hay que leer con todos los sentidos puestos para conseguir atar los cabos. Quien se embarque en esta aventura tendrá recompensa: un final magistral en el que todas las piezas encajan a la perfección.
Hora zulú es, además, un libro delicioso. Con una prosa delicada, salpicada de unos poemas crípticos pero de gran belleza, demuestra una inmensa sensibilidad por parte de su autor. Entre sus líneas encontraremos, si estamos lo suficientemente atentos, profundas reflexiones sobre la locura, un manifiesto en defensa de nuestra madre Tierra, y una tristísima historia de amor. No pude evitar acordarme del pobre Torcuato Luca de Tena y pensar que, en algún sentido, esta es la novela que él quiso escribir y no supo.
Me leí Hora zulú en un solo día. Es un libro que, por razones que no quiero destripar, hace a uno muy consciente del tiempo y del paso de las horas. Al cerrar la última página suspiré, sonreí, y pensé en lo bien invertidos que habían quedado esos minutos de mi vida. Hora zulú es, simple y llanamente, buena literatura. No quiero contarles más porque quiero que lo descubran ustedes mismos. ¿A qué esperan?